Exposición "Habitaciones", de JOSE HERRERA, en la Casa Torres Hernández Farré, de Güimar
El artista José Herrera ha presentado, a partir de este pasado sábado, día 1 de marzo, una exposición individual, bajo el título de "Habitaciones", en la Casa Torres Hernández Farré, de Güimar. Esta muestra estará abierta al público a lo largo de este mes de marzo de 2014, en horario de 10 a 13:00 y de 16 a 19:00 horas.
Hemos querido y decidido hacer un comentario de esta muestra, en nuestro Blog, no sólo por el interés del artista que la protagoniza, sino también por el planteamiento en sí mismo de la exposición, y el lugar elegido para desarrollarla.
El sábado, día uno, pusimos camino en dirección a Güimar, con toda intención y voluntad, porque el amigo José Herrera nos tiene ganado a su causa, desde hace ya bastante tiempo. Su trabajo ha seguido una trayectoria y desarrollo prácticamente impecable, y en varias ocasiones incluso ejemplarizante. Para sorpresa propia y de muchos otros, que también acudieron a la inauguración, o tal vez no tanto, nos encontramos en Güimar un nutrido grupo de amigos de Pepe, artistas y profesionales del arte, vinculados a la Universidad de La Laguna, en sus Facultades de Filología y de Bellas Artes, como también críticos y comisarios de arte. La satisfacción por encontrarnos en Güimar, en torno a esta exposición de José Herrera, era claramente colectiva.
En la presentación de la exposición tomó la palabra José Herrera, después de un agradecimiento previo a los propietarios de la Casa Torres Hernández Farré, por haber cedido la misma para que Pepe interviniera en ella, y fuese distribuyendo su obra en las distintas habitaciones de la casa. Pepe nos comentó a todos cómo le había llegado la propuesta, cómo se había trasladado a Güimar a conocer el espacio, cómo se introdujo en el mismo y comenzó a convivir e identificarse con las distintas habitaciones. En palabras suyas, en todo momento se sintió bien mientras recorría las estancias y planificaba lo que podía realizar o presentar en cada una de ellas. Las dificultades, reconoció, sólo se le presentaron a la hora de habilitar el espacio, ya que se trataba de una casa deshabitada, con muchos enseres en desuso en su interior. Hubo que limpiarla, incluso arreglar buena parte de la techumbre, para que no se mojara el interior, y ponerle además una mínima iluminación, con bombillas como las que podemos encontrar en cualquier de nuestras casas de campo. En este punto, en concreto, José Herrera aclaró que su intención es que la exposición se pudiese contemplar con luz de día, por lo que la escasa luz eléctrica presente no resultaba determinante.
Desde esta misma estancia se accede a otra habitación en la que José Herrera colocó una serie de sábanas blancas pinzadas como en una tendedera y alineadas en filas sucesivas, llenando por completo el espacio, generando una obra penetrable, en la que el visitante puede integrarse literalmente en la obra, pasando a formar parte de ella.
En la siguiente habitación José Herrera inundó las tres paredes de la misma con un sinfín de pequeñas piezas clavadas a la misma, modificando por completo este espacio, creando un nuevo escenario muy sugerente y atractivo. Desde aquí accedemos a otra de las habitaciones en la que Pepe modifica el planteamiento anterior, dejando solamente una pieza en el fondo de la habitación, una pieza dorada, que a pesar de su pequeñez en todo el espacio para ella nos gana inmediatamente nuestra atención.
Felicitamos a José Herrera, y recomendamos a todos que se acerquen a Güimar a conocer su exposición "Habitaciones". Les garantizamos que no perderán el viaje.
Estimado amigo, le remito a un blog que puede ser de su interés: http://surabsoluto.tumblr.com/
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Francisco León